El valor de la carne vacuna vuelve a moverse al alza tras varios meses de estabilidad. Según estimaciones del sector, los precios podrían incrementarse entre un 10 % y un 15 % en los próximos días, impulsados por la suba del ganado en pie, las condiciones climáticas y la especulación previa a las fiestas de fin de año.
Productores y frigoríficos advierten que la falta de hacienda disponible y la recuperación de la demanda externa presionan sobre los valores. En el Mercado Agroganadero de Cañuelas, los animales para consumo registraron aumentos de entre 100 y 200 pesos por kilo, ubicando el promedio en torno a los 3.500 pesos, mientras que el destinado a exportación ronda los 4.000 pesos.
El presidente de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra), Miguel Schiaritti, explicó que “hubo una suba importante a pesar de que ingresaron más cabezas de ganado”, y advirtió que “podría continuar en los próximos días por falta de oferta”. De concretarse, los cortes más populares —como el asado, la nalga o la paleta— podrían superar los 20.000 pesos por kilo en las carnicerías.
Durante los últimos meses, la carne había aumentado por debajo de la inflación, gracias a una baja circunstancial en los costos y a la retracción del consumo interno. Sin embargo, la combinación de un mercado más activo y el ajuste del precio del ganado vuelve a poner presión sobre los mostradores.
Para los consumidores, la noticia llega en un contexto de ingresos rezagados frente a la inflación. Los especialistas advierten que una nueva suba podría empujar a muchas familias a reemplazar la carne vacuna por opciones más accesibles, como pollo o cerdo, y anticipan que el impacto se sentirá con fuerza en el índice de precios de noviembre.