La Cámara de Diputados dio luz verde por amplia mayoría a la declaración de emergencia sanitaria para el Hospital Garrahan, un centro neurálgico en la atención pediátrica del país. Esta aprobación se suma al reciente respaldo legislativo al aumento de recursos para las universidades nacionales, marcando así un segundo desafío para el Gobierno Nacional en el Congreso.
La iniciativa aprobada busca garantizar fondos adicionales para la adquisición de insumos, la mejora salarial del personal y la expansión de la capacidad hospitalaria, en respuesta a la crisis que atraviesa el sistema de salud pediátrica. Durante el debate, legisladores de distintos bloques enfatizaron la importancia de asegurar la calidad y continuidad de la atención para la población infantil más vulnerable.
Este proyecto, que contó con un respaldo transversal, responde a demandas expresadas por profesionales de la salud y organizaciones civiles que alertaron sobre la saturación del Hospital Garrahan y la insuficiencia de recursos para cubrir las necesidades básicas de atención.
El rechazo a las advertencias del Ejecutivo sobre el impacto fiscal de estas medidas reafirma el rol activo del Congreso en la definición de prioridades sociales, a pocos meses del inicio del calendario electoral. La decisión pone en evidencia una creciente tensión entre el Poder Legislativo y el Gobierno, que ya había manifestado su oposición al aumento presupuestario para universidades.
El próximo paso será la revisión del proyecto en el Senado, donde el Gobierno buscará revertir estas aprobaciones o negociar modificaciones. Sin embargo, la contundente mayoría obtenida en Diputados fortalece la posición de los sectores que reclaman mayor inversión en salud y educación pública.
En definitiva, la emergencia del Hospital Garrahan se convierte en un símbolo del debate político y social sobre la distribución de recursos y la atención a sectores estratégicos en Argentina.