Un informe reciente del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) reveló que, en los primeros nueve meses del año, los salarios acumulan una pérdida superior al 3% frente a la inflación. A pesar de los aumentos paritarios firmados en distintos sectores, la proyección hacia diciembre indica que los ingresos reales caerán alrededor de un 5,3%, consolidando una tendencia negativa que afecta tanto al sector público como al privado.
El estudio advierte que el freno en las recomposiciones salariales coincide con una inflación que se mantiene firme, sin señales de desaceleración en el corto plazo. “Las estimaciones del mercado están lejos de esperar una baja de la inflación”, señaló el director del CEPA, Hernán Letcher, al explicar que las paritarias quedaron por debajo del aumento sostenido de precios en los últimos meses.
Según el relevamiento, la mayoría de los acuerdos firmados hasta fin de año prevé subas menores al 2% mensual, mientras que los precios continúan en alza por encima de ese nivel. Esta diferencia acumula un deterioro constante en el poder de compra, que impacta de manera directa en el consumo y en la actividad económica.
La pérdida del salario real se acentúa en los trabajadores estatales y en los sectores con menor capacidad de negociación, donde la recomposición se encuentra por debajo del promedio general. En tanto, el empleo registrado muestra señales de estancamiento y los ingresos informales presentan caídas aún más pronunciadas.
De mantenerse este escenario, 2025 podría cerrar con una de las mayores brechas entre salarios e inflación de los últimos años, reflejando un retroceso en la capacidad adquisitiva que compromete el consumo interno y profundiza el malestar social.