La consultora LCG informó que en la tercera semana de mayo los precios en el rubro de alimentos y bebidas registraron un aumento del 2,1%, revirtiendo la baja de la semana anterior, cuando se había observado una deflación del 1,6%.
El informe destaca que el aumento fue impulsado principalmente por subas en carnes y verduras, que explicaron casi la mitad del incremento semanal. A pesar de esta aceleración, la inflación mensual promedio de las últimas cuatro semanas descendió a 0,2%, debido a la fuerte desaceleración registrada a principios de mayo.
Los principales aumentos en la tercera semana fueron:
Azúcar, miel y cacao: +5,3%
Verduras: +4%
Comidas para llevar: +2,5%
Carnes: +2,2%
Panificados y pastas: +2%
Lácteos: +1,9%
Aunque cerca del 70% de los productos relevados no mostró variaciones, se amplió la brecha entre los que subieron (20%) y los que bajaron (11%).
En paralelo, el Índice de Precios Internos al por Mayor (IPIM) mostró un aumento del 2,8% en abril, impulsado por una suba del 6% en productos importados, lo que podría trasladarse a los precios minoristas en las próximas semanas.
Este comportamiento refleja una tendencia volátil en el mercado de alimentos, con incrementos que podrían afectar la inflación general en lo que resta del mes.