El ministro de Economía, Sergio Massa prepara una renegociación con el FMI para afrontar los vencimientos de deuda con el organismo por U$S 12.000 millones que están previsto entre noviembre y abril próximo.
Con las reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA) en mínimos históricos, ese es el obstáculo que deberá superar el próximo Gobierno hasta que comiencen a ingresar los dólares de la cosecha gruesa.
Es por ello que, en caso de ganar el balotaje, Sergio Massa, tiene previsto comenzar rápidamente una renegociación de la deuda con el Fondo Monetario Internacional para aliviar las obligaciones de los próximos meses y evitar mayores tensiones cambiarias.
El Gobierno pagó el último martes una serie de vencimientos por un total de U$S 2.590 millones, con lo que canceló todas las obligaciones pendientes con el organismo correspondientes a octubre, situación que llevó las reservas brutas del BCRA a U$S 21.861 millones, el menor nivel en casi 18 años.
En el último bimestre del año hay compromisos en moneda extranjera por U$S 2.460 millones, entre capital e intereses, de los cuales U$S 1.600 millones corresponden al FMI mientras que los U$S 860 millones restantes son a otros organismos.
El secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein, y el jefe de asesores, Leonardo Madcur, ya comenzaron las conversaciones con el staff técnico del FMI por la séptima revisión del acuerdo vigente.
De los resultados de esta negociación depende que el país reciba un desembolso de U$S 3.250 millones antes de fin de año.
En febrero las obligaciones suman U$S 851 millones, en marzo U$S 791 millones y U$S 2.257 millones en abril, por lo que son U$S 9.461 millones en el primer cuatrimestre de 2024.
Para el próximo año el ministro aspira a tener superávit energético, mayor ingreso de divisas del sector agropecuario, menos importaciones de combustibles y condicionar el pago de la deuda con el Fondo Monetario Internacional al nivel de exportaciones.