El Senado de la Nación aprobó por amplia mayoría la insistencia con la Ley de Emergencia en Discapacidad y rechazó el veto presidencial de Javier Milei, en una decisión que marca un hecho político inédito desde el inicio de su gestión.
Con 63 votos afirmativos y solo 7 en contra, la Cámara alta ratificó la norma que había sido sancionada previamente por ambas Cámaras y que garantiza la continuidad de pensiones, la actualización de aranceles en prestaciones y el fortalecimiento de la asistencia a personas con discapacidad hasta fines de 2026.
El oficialismo quedó aislado en la votación, ya que la oposición se unió en bloque y logró superar con holgura los dos tercios necesarios. Durante el debate, senadores de distintos espacios coincidieron en que el veto representaba un retroceso en derechos adquiridos y advirtieron que el ajuste no puede recaer sobre los sectores más vulnerables.
Ante este escenario, el Presidente anticipó que recurrirá a la vía judicial para intentar frenar la aplicación de la norma, aunque especialistas en derecho constitucional señalaron que el Congreso ejerció una facultad que no admite cuestionamientos.
La decisión representa un fuerte revés político para Milei, que hasta ahora había utilizado la herramienta del veto como uno de los pocos resortes de poder frente a un Parlamento adverso. Con esta derrota, se abre un nuevo frente de tensión entre el Ejecutivo y el Legislativo, en medio de un clima de creciente conflictividad social.