El Senado de la Nación rechazó este jueves cinco decretos firmados por el presidente Javier Milei, que buscaban eliminar o reestructurar distintos organismos estatales. Con una votación amplia y transversal, la Cámara alta dejó sin efecto normas que formaban parte del ajuste impulsado por el oficialismo bajo el discurso de la “motosierra”.
Las iniciativas afectaban a áreas sensibles como el Banco Nacional de Datos Genéticos, el INTA, el INTI, la Dirección Nacional de Vialidad y la normativa vinculada a la Marina Mercante, entre otros entes. El rechazo contó con entre 55 y 60 votos negativos, frente a poco más de una decena de apoyos.
El oficialismo quedó en clara minoría: solo recibió el respaldo parcial de algunos senadores del PRO y de aliados provinciales, mientras que varios legisladores cercanos optaron por abstenerse o ausentarse. La falta de apoyo evidenció que Milei no logró articular el acompañamiento de gobernadores ni de bloques aliados en esta instancia.
Estos decretos habían sido dictados bajo facultades delegadas otorgadas por la Ley Bases, con el fin de reducir la estructura del Estado y recortar gastos. Sin embargo, la oposición planteó que los cambios excedían esas atribuciones y que, en algunos casos, ponían en riesgo funciones estratégicas para el país.
El rechazo del Senado se suma a las medidas judiciales que ya habían paralizado parte de la aplicación de los decretos, lo que refuerza el freno institucional al programa de reformas del Ejecutivo.
Con este resultado, Milei enfrenta un nuevo límite a su plan de desregulación y reducción del Estado, en un contexto donde el Congreso empieza a mostrar capacidad de condicionar las principales apuestas del Gobierno.