La Cámara de Diputados rechazó este martes el veto del presidente Javier Milei a la ley que declara la emergencia en discapacidad hasta diciembre de 2027. La iniciativa busca garantizar la cobertura de prestaciones básicas y asistencia para personas con discapacidad en un contexto de fuertes reclamos sociales por recortes en el área.
La votación en el recinto terminó con 172 votos afirmativos, 73 negativos y 2 abstenciones, superando la mayoría especial de dos tercios que exige la Constitución para dejar sin efecto un veto presidencial. La oposición consiguió alinear a bloques diversos y también sumó adhesiones de legisladores que habitualmente acompañan al oficialismo, lo que evidenció tensiones dentro de los aliados del Gobierno.
El proyecto ya había sido aprobado por ambas cámaras antes del veto de Milei, quien lo fundamentó en el impacto fiscal que implicaría su aplicación. Sin embargo, para los impulsores de la norma, se trata de una medida indispensable para garantizar derechos y evitar que miles de personas queden sin atención en salud, educación y transporte.
Con este resultado, la discusión se traslada al Senado. Allí también será necesario reunir los dos tercios de los votos para insistir con la ley. En caso de lograrlo, la norma quedará sancionada de manera definitiva y el Poder Ejecutivo no tendrá la posibilidad de vetarla nuevamente.
El tratamiento de esta iniciativa se da en un marco de creciente confrontación entre el Congreso y el Gobierno, que ya había sufrido reveses en temas sensibles como jubilaciones y fondos de coparticipación. La pulseada en el Senado definirá si la emergencia en discapacidad se convierte en uno de los límites más firmes impuestos hasta ahora a la política de ajuste del oficialismo.