¿Quién no se tienta con una porción de lechón a la parrilla en las Fiestas? Este manjar es uno de los clásicos de las mesas de Navidad y de Año Nuevo, y muchas veces falta quién se anime a prepararlo. Pero con estos tips vas a poder hacerlo sin problemas, aunque requiere de tiempo y paciencia.
#1. Limpieza. Es necesario limpiar muy bien el lechón y sacarle todo resto de sangre y pelos que hayan quedado.
#2. Parrilla. Tiene que estar bien levantada, lejos del fuego, para que se vaya haciendo despacio.
#3. Colocación. Se pone en la parrilla con el cuero hacia arriba. Conviene que la cabeza del lechón esté ubicada para el lado del fuego.
#4. Salmuera. Preparála con sal gruesa disuelta en agua hervida y muy caliente. Pincelá el cuero del lechón con esta preparación, que sirve para darle el característico color dorado.
#5. Carbón. Solo usá brasas que estén bien encendidas. Primero se colocan solamente en los extremos, porque la idea es que el costillar se cocine con el calor que le llega de manera indirecta.
#6. Brasas. Agregá brasas de a poco y siempre en los extremos; controlá que el calor que le llegue al lechón nunca decaiga. Calculá 4 horas para hacer esto.
#7. Vuelta. Ahora tenés que dar vuelta al lechón (solo una vez), para poner el cuero hacia abajo. Calculá otras 2 horas más de cocción.
#8. Chimichurri. Como cocinás el lechón sin condimentos, más allá de la salmuera, es recomendable que lo sirvas con un chimichurri que podés preparar o comprar.
Si además de este clásico manjar tenés ganas de hacer algo distinto, que rompa con lo tradicional, Cucinare tiene una propuesta para vos: un pan dulce salado.
Deja un comentario