El presidente Javier Milei tuvo que cancelar el acto de campaña que estaba previsto en Ushuaia, Tierra del Fuego, luego de que se registraran fuertes manifestaciones en su contra en las inmediaciones del lugar. La actividad se limitó a una breve aparición en la puerta del hotel donde se alojaba, desde donde se dirigió a un pequeño grupo con un megáfono antes de emprender el regreso a Buenos Aires.
Las protestas reunieron a distintos sectores sociales y políticos que expresaron su rechazo a la visita presidencial con pancartas y consignas críticas. Desde La Libertad Avanza denunciaron que la convocatoria habría sido impulsada por funcionarios del gobierno provincial, encabezado por Gustavo Melella, e incluso señalaron chats filtrados en los que se organizaban empapelados en contra de Milei.
El acto formaba parte de la estrategia electoral de cara a las legislativas de octubre, donde el oficialismo busca consolidar su presencia en el Congreso y respaldar a sus candidatos en Tierra del Fuego. Sin embargo, la jornada dejó en evidencia la tensión política entre la Casa Rosada y la administración provincial, además de un escenario adverso para la campaña oficialista en el extremo sur del país.
Con este traspié, el equipo presidencial deberá replantear la estrategia de recorridas, en un clima donde las protestas y la conflictividad social marcan la agenda política.