Desde el primero de mayo se actualizará el impuesto a los combustibles líquidos (ICL), lo que implica que las petroleras YPF, Shell, Axion y Puma Energy aumentarán los valores en los surtidores.
El aumento para la nafta y el gasoil será de al menos 8% en caso de que la suba se realice tal como estaba prevista originalmente, por lo que podría sumarse la devaluación mensual del 2% que aplica el BCRA.
Sin embargo, el Gobierno no descarta que el incremento se aplique en dos tramos divididos entre el mes que viene y junio para no sumar mayor presión al Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec.
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